Templo de Neptuno
Coste | 2,400 |
Coste de reparación | 960 |
Coste de reparación si está en ruinas | 1,920 |
- Edicto de pan y circo: +1 al orden público
- +20% a la riqueza por el comercio marítimo
- +4 de influencia cultural latina
- +2 al orden público
Descripción
Neptuno no solo era el dios de los mares, sino del agua en general. Tonto era el marinero que no se molestara ni en honrar a Neptuno antes de embarcarse. El Mediterráneo podía ser un mar muy traicionero. Con sus corrientes, podía arrastrar barcos y destruirlos con sus inesperados escollos. Neptuno, hermano de Júpiter, era sin duda el rey del mar, lo que le convertía en una pieza esencial en las ambiciones marítimas de Roma.
Aunque es fácil pensar en Roma como una potencia terrestre, gran parte de sus triunfos y su influencia provienen de su fortaleza naval en el Mediterráneo. La Neptunalia, festividad principal dedicada a Neptuno, se celebraba con el calor del verano, en una época del año en la que los ríos de la parte central de Italia debían de registrar un caudal bajísimo, tras el invierno y el deshielo de la primavera. Este momento del año debía de parecer a los romanos el más oportuno para celebrar la generosidad de Neptuno, al menos para asegurarse la abundancia de agua en los meses siguientes.
Neptuno era también el dios de las carreras de caballos, lo que explica, al menos en parte, por qué las señales que indicaban el número de vueltas recorridas en el Circo Máximo tenían forma de delfín.