Santuario real
Coste | 1,400 |
Coste de reparación | 560 |
Coste de reparación si está en ruinas | 1,120 |
- Edicto de pan y circo: +5% a la riqueza generada por instalaciones agrícolas
- +5 a la riqueza por la cultura
- +3 de influencia cultural helénica
- +2 a los puntos de investigación por turno
- +3 al orden público
- -1 alimentos
Descripción
La veneración a los ancestros y la adoración de la realeza divina eran comunes en el mundo antiguo. A los ancestros se les veneraba incluso en las casas más humildes, mientras que los templos y las grandes tumbas se construían para conmemorar a los gobernantes fallecidos. En Egipto, los gobernantes ptolemaicos siguieron esta útil tradición a la muerte de Alejandro Magno. Todas las grandes tumbas y los templos eran un memorial a la grandeza de los gobernantes que los construyeron.
Alejandro fue sepultado por primera vez en Menfis por orden del primer Ptolomeo, del que se dice robó sus restos momificados cuando los llevaban a Babilonia. Su cuerpo sería llevado más tarde a Alejandría y repartido entre dos tumbas, una de las cuales contenía también a miembros de la dinastía ptolemaica como muestra de su estatus. Tanto Julio César como Octaviano visitaron la tumba de Alejandro para presentar sus respetos, pues tan pías demostraciones eran una clara manera de demostrar su propia grandeza.