Cuando una unidad libra batallas y sobrevive, gana puntos de experiencia que mejoran su habilidad para afrontar situaciones de combate en el futuro. Su primer nivel de experiencia lo consigue sufriendo un 25% de bajas, sin importar el número de enemigos eliminados. Entre otras cosas, la experiencia incrementa la moral; por lo tanto, una unidad con experiencia será menos susceptible a caer presa del pánico y huir de la batalla en situaciones de estrés o fatiga. Los generales también ganan experiencia al terminar con éxito una batalla. Con esa experiencia ganada, podrás dotar a tus generales de poderosas habilidades militares.
La experiencia de la tripulación de los barcos funciona de la misma manera que para las unidades de tierra, con la excepción de que, cuando un barco no puede continuar luchando, ya sea porque se haya rendido, porque esté huyendo o porque haya quedado destruido, todos los puntos de experiencia que la tripulación haya podido obtener se repartirán entre los barcos contra los que estaba combatiendo.