Las armas de artillería de asedio, como los onagros, pueden ser reclutadas del mismo modo que las demás unidades. Sin embargo, las máquinas de asedio se construyen en el sitio y se despliegan al atacar un asentamiento, por lo que necesitan una serie de turnos antes de poder sumarse al combate. Estas van desde los simples arietes hasta las enormes torres de asedio y sirven para atacar las murallas enemigas, aunque son lentas, pesadas y un objetivo atractivo para el enemigo. Es por esto que se recomienda escoltarlas por si el contrario osa salir para enfrentarse a sus atacantes. El siguiente equipamiento de asedio está disponible, dependiendo de la investigación de cualquier tecnología requerida:
La forma más sencilla de equipamiento, es sencillamente una gran escalera que se puede inclinar contra las murallas de un asentamiento para que las tropas puedan subir por ella hasta llegar a las almenas y capturar las torres y puertas. Tener el control de la caseta de vigilancia permite a las demás tropas entrar en el asentamiento asediado sin sufrir los estragos de los proyectiles o el aceite hirviendo.
Los arietes son una forma sencilla y efectiva de echar abajo las puertas enemigas. Los hay de tres tipos: ligeros, medianos y pesados y cada uno tiene una armadura más pesada que el tipo inferior. Los arietes también afectan a la moral de los defensores, pues cada embestida actúa como un ensordecedor recordatorio de que lo siguiente es el asalto y una muerte casi segura.
Hay tres tipos de torres de asedio: ligeras, medianas y pesadas, cada una con dos alturas distintas: ocho y quince metros. Las torres ligeras proporcionan acceso rápido a las murallas de un asentamiento y cierta protección a las unidades que hay dentro. Las torres medianas cuentan con un revestimiento de piel para proteger a sus tropas. Las torres pesadas tienen un revestimiento de placas de hierro superior, por lo que sus tropas están bien protegidas frente a los proyectiles enemigos.
Cuando libres una batalla de asedio como defensor, no olvides que el enemigo intentará entrar y evitar tus defensas o penetrarlas por la fuerza. ¡Usa arqueros para matar a las unidades que se aproximen, y emplea tropas de combate cuerpo a cuerpo para matar a los que consigan atravesar las murallas del castillo! El enemigo intentará acabar con todos los defensores y, si sus hombres huyen en masa del asentamiento, la batalla se dará por terminada.
Las defensas montadas sobre las murallas de un asentamiento dependen enteramente del nivel de mejora de su edificio principal. El tamaño de las murallas no cambiará, pero a ellas se añadirán torres con arqueros y escorpiones, a medida que sea mejorado el edificio principal, hasta conseguir bastiones: unas plataformas de artillería en las que podrás posicionar un escorpión, una balista o un onagro. Por consiguiente, una sola arma de artillería situada sobre un bastión contará con una munición más efectiva que la que podría usar si fuera parte de una batería. Las siguientes defensas están disponibles para los asediados: