Hemiolia de asalto, Jabalineros ilotas
Coste de reclutamiento | 330 | |
Coste de mantenimiento | 66 | |
Daño de proyectiles | 29 | |
Alcance | 80 | |
Disparos por minuto | 7 | |
Salud de los barcos | 402 | |
Velocidad de barcos | 6 | |
At. cuerpo a cuerpo | 8 | |
Daño de armas | 24 | |
Def. cuerpo a cuerpo | 37 | |
Armadura | 15 | |
Salud | 45 |
Puntos fuertes y débiles
- Muy pobre resistencia del casco
- Tripulación ligera
- Grandísima velocidad
- Embestida débil
- Abordaje muy pobre
- Combate con proyectiles pobre
- Corto alcance
- Gran velocidad de disparo
- Inflige muchísimo daño y cuenta con una muy buena perforación de armaduras
- Muy débil cuerpo a cuerpo
- Moral muy escasa
Descripción
La hemiolia era una galera ligera, una de las embarcaciones preferidas de los piratas del mundo antiguo. Evolucionó a partir del birreme, un barco que contaba con dos cubiertas completas de remos. La hemiolia redujo el número de remos en la cubierta superior y dejó más o menos la mitad de remos y remeros en la sección central del barco. Este menor número de remeros influía poco en la velocidad general porque el peso de carga también disminuía. Gracias a que usaba tanto remos como velas, y dado que su tripulación podía cambiar el modo de propulsión con rapidez, la hemiolia resultó ser la embarcación ideal para perseguir los ricos navíos mercantes, más grandes y pesados. Los abordajes se iniciaban desde las hemiolias, las embestidas no eran una táctica útil, pues los botines acaban más con los peces que enriqueciendo a los piratas. La velocidad y agilidad de las hemiolias las hacía útiles para la exploración, como barcos de suministro y para rematar a los barcos dañados en las batallas.
Una clase de siervos no ciudadanos dentro de la zona de control de Esparta, los ilotas eran esclavos en muchos sentidos. Estos trabajaban la tierra en los ricos valles del Eurotas y el Parmiso, en los que se asentaban Laconia y Mesenia, y se les obligaba a dar la mitad de lo que producían a la élite espartana. Además, los ilotas eran asignados a los ciudadanos espartanos como sirvientes domésticos. Cuando se les obligaba a combatir se les utilizaba como peltastas y en algunos casos conseguían la libertad tras este servicio. Tras el terremoto de 464 a. C. que asoló Esparta y en el que se cree perecieron unas veinte mil personas, los ilotas, que procedían principalmente de Mesenia, se rebelaron junto a los periecos de Aitaia y Touria. El vil y cruento tratamiento de los ilotas a manos de sus señores espartanos se intensificó tras este evento y podría haber llevado al establecimiento de la tradicional krypteia que se llevaba a cabo cada otoño. Esta era una declaración de guerra de los éforos contra los ilotas. Durante la krypteia, los miembros de la agogé espartana podían demostrar su habilidad como guerreros. Armados solo con un cuchillo se esperaba de ellos que vivieran de la tierra y podían espiar, robar y matar a los ilotas. Por otra parte, todo joven espartano apresado por los ilotas podía ser apaleado hasta morir por haber permitido su captura.