Carros falcados
Coste de reclutamiento | 1,380 | |
Coste de mantenimiento | 200 | |
At. cuerpo a cuerpo | 54 | |
Daño de armas | 35 | |
Bonificación de carga | 45 | |
Def. cuerpo a cuerpo | 29 | |
Armadura | 60 | |
Salud | 100 | |
Moral base | 65 |
Habilidades
Puntos fuertes y débiles
- De movimiento veloz
- Muy buena capacidad para hacer cargas
- Normal en cuerpo a cuerpo
- Goza de una buena moral
Descripción
Los carros falcados pesados se desarrollaron como respuesta a la infantería acorazada y a la falange durante las guerras médicas. Su diseño original fue probablemente indio o persa, aunque fue utilizado en muchas culturas, como ejemplifica el caso de Mitrídates VI de Ponto, que consiguió usar con éxito los carros falcados contra Bitinia, en la batalla del río Amnias, en el 89 a. C., al principio de la primera guerra mitridática. Para atacar, los carruajes aprovecharon al máximo su impulso y las cuchillas montadas sobre sus ejes, de modo que pudieran penetrar las líneas enemigas y crear así puntos débiles que la caballería pudiera explotar. Incluso si los caballos se desviaban instintivamente en el último momento, las largas cuchillas se encargarían de crear huecos. Y, si quedaban supervivientes, las posibilidades de que estos fueran presas de la confusión y el pánico eran muy altas. Tanto el auriga como los caballos llevaban pesadas corazas, lo que tenía su origen en la caballería catafracta tardía. A la hora de enfrentarse a carros falcados, la estrategia más simple era la de abrir filas para permitirles pasar y cerrarlas rápidamente. Sin embargo, este tipo de carros perdieron gran parte de su eficacia cuando se introdujo la larga sarissa.