Dieres de asalto, Lanceros mercenarios sabeos

Coste de reclutamiento 390
Coste de mantenimiento 290
Salud de los barcos 501
Velocidad de barcos 6
At. cuerpo a cuerpo 13
Daño de armas 25
Def. cuerpo a cuerpo 49
Armadura 45
Salud 50
Puntos fuertes y débiles
  • Resistencia del casco muy débil
  • Tripulación muy ligera
  • Mucha velocidad
  • Embestida débil
  • Buen abordaje
  • Unidad defensiva normal
  • Causa pocos daños pero cuenta con una perforación de armaduras normal
  • Débil en ataque
  • Escasa moral
Descripción

El espolón de la línea de flotación fue acoplado a un barco por primera vez alrededor del 850 a. C. Esto transformó los barcos de guerra y las tácticas navales. Aquellos dejaron de ser las plataformas de los combates de infantería sobre el agua para pasar a ser armas en sí mismos. Las galeras cambiaron, adaptándose a la nueva realidad. Una embestida con velocidad era capaz de perforar y hundir un navío enemigo, para lo cual se necesitaban barcos ágiles, estrechos y veloces. Para obtener más velocidad se necesitaban obviamente más remos. Un barco rápido con una sola fila de remos era demasiado largo y poco práctico. La solución era colocar un grupo adicional de remeros sobre los primeros, pero ligeramente escalonados para permitir más bancos para los remeros. Los birremes, o el equivalente griego dieres, no eran más largos que los diseños previos, pero sí contaban con el doble de remos. Eran rápidos, maniobrables, y podían transportar un contingente de combate. Algunas naciones daban a la tripulación de los birremes vasijas de fuego. Estas vasijas de arcilla se llenaban de aceite y alquitrán y las lanzaban a los barcos enemigos con la esperanza de incendiarlos.

Los guerreros de la región sabea, bien fuesen mercenarios o tropas auxiliares del Imperio Romano, hacían de infantería ligera, caballería o arqueros. Vestían a la manera del desierto y estaban muy familiarizados con los lugares áridos, por los que se movían con comodidad. Sin embargo, su cualidad más importante no era esta, sino la de ser buenos luchadores, por no mencionar su gran valía, muy por encima de los ciudadanos ordinarios o los soldados de leva. La causa de ello se debe en gran medida a la independencia de que gozaron los gobernantes sabeos, desde el siglo VIII a. C. hasta el 275 d. C. Esta singularidad tenía su origen tanto en su poder militar, como en la diplomacia y el comercio de especias, entre las que se incluían la mirra y el francoincienso. A pesar de que Roma no los había conquistado nunca, los guerreros sabeos sí que desempeñaban trabajos como mercenarios o tropas auxiliares a su servicio.

Requiere
Regiones
Yatrib Ptolemais Terón Meroe Ptolemais Terón Eudaemon Marib Marib Gerrhaea Adummatu Aksum Meroe Mascate Aksum Eudaemon Gerrhaea Mascate Adummatu Yatrib