Hemiolia de asalto, Arqueros mercenarios persas

Coste de reclutamiento 400
Coste de mantenimiento 300
Daño de proyectiles 35
Alcance 150
Disparos por minuto 6
Salud de los barcos 467
Velocidad de barcos 6
At. cuerpo a cuerpo 9
Daño de armas 24
Def. cuerpo a cuerpo 13
Armadura 10
Salud 45
Puntos fuertes y débiles
  • Muy pobre resistencia del casco
  • Tripulación ligera
  • Grandísima velocidad
  • Embestida débil
  • Abordaje muy pobre
  • Combate con proyectiles pobre
  • Largo alcance
  • Velocidad de disparo normal
  • Inflige mucho daño, pero escasa perforación de armaduras
  • Muy débil cuerpo a cuerpo
  • Moral muy escasa
Descripción

La hemiolia era una galera ligera, una de las embarcaciones preferidas de los piratas del mundo antiguo. Evolucionó a partir del birreme, un barco que contaba con dos cubiertas completas de remos. La hemiolia redujo el número de remos en la cubierta superior y dejó más o menos la mitad de remos y remeros en la sección central del barco. Este menor número de remeros influía poco en la velocidad general porque el peso de carga también disminuía. Gracias a que usaba tanto remos como velas, y dado que su tripulación podía cambiar el modo de propulsión con rapidez, la hemiolia resultó ser la embarcación ideal para perseguir los ricos navíos mercantes, más grandes y pesados. Los abordajes se iniciaban desde las hemiolias, las embestidas no eran una táctica útil, pues los botines acaban más con los peces que enriqueciendo a los piratas. La velocidad y agilidad de las hemiolias las hacía útiles para la exploración, como barcos de suministro y para rematar a los barcos dañados en las batallas.

Había muy pocos soldados profesionales persas y, aparte de los antiguos Inmortales Aqueménidas de élite y algunos mercenarios hoplitas, no recibían un entrenamiento formal. En su lugar, las tropas eran reclutadas por los ricos terratenientes de forma obligada durante los tiempos de guerra. Esta infantería de leva se componía principalmente de honderos, arqueros y jabalineros con escasa armadura, aunque algunos tenían escudos para protegerse. Como es de esperar, dada la geografía local, la caballería era un componente importante de cualquier ejército oriental y era muy variada. La caballería ligera llevaba armadura de escamas de bronce o hierro sobre una túnica. Estos jinetes llevaban jabalinas y una espada, pero no tenían escudo. Los arqueros a caballo se usaban para acosar a la infantería con ataques rápidos y despiadados. La guardia real formaba parte de la caballería pesada. Los partos, y más tarde los sasánidas persas, desarrollaron armaduras que cubrían por completo a sus valiosos caballos, para protegerlos también a ellos, no solo a los temibles catafractos, quienes llevaban tanta armadura como los caballeros medievales.