La historia es el estudio del pasado y la historiografía es el estudio sobre cómo estudiamos el pasado. En la antigüedad, floreció la historia y el interés por preservar los hechos del pasado y el presente y eruditos como Heródoto de Halicarnaso son reconocidos como los padres de la historia. Heródoto, además, es conocido por su enfoque crítico a la hora de documentar la historia. Viajó mucho para recabar información y fue uno de los primeros en separar rigurosamente las fuentes de información en función de su veracidad, hoy conocidas como fuentes primarias y secundarias. Su enfoque se extendió a los métodos de sabios posteriores como Tucídides, quien documentó la guerra del Peloponeso de manera sistemática.
