Impuesto del terreno
- +2% a la riqueza por el comercio
- +2% a los ingresos arancelarios por acuerdos comerciales
Descripción
Grabar impuestos a la tierra o, más bien, a lo producido por ella era una de las maneras más eficientes que tenía un gobierno para obtener riqueza de su pueblo. Normalmente, los gravámenes a la tierra se calculaban en función del tamaño de la finca. No sin controversia, el impuesto podía aplicarse con anterioridad a la recogida de la cosecha misma, lo que implicaba que si una sequía o una inundación le robaban al agricultor su cosecha, este aún tendría que pagar impuestos según la previsión de la cosecha que de otro modo habría obtenido.