Arqueros a camello auxiliares
Coste de reclutamiento | 450 | |
Coste de mantenimiento | 90 | |
Daño de proyectiles | 35 | |
Alcance | 125 | |
Disparos por minuto | 6 | |
Munición | 15 | |
At. cuerpo a cuerpo | 16 | |
Daño de armas | 24 | |
Bonificación de carga | 8 | |
Def. cuerpo a cuerpo | 15 | |
Armadura | 10 | |
Salud | 85 | |
Moral base | 35 |
Habilidades
- Resistente a la fatiga
- Esconderse en el bosque
- Disparar en movimiento
- Resistente al calor
- Asustar caballos
- Disparo incendiario
- Disparo pesado
- Disparo silbante
Puntos fuertes y débiles
- Largo alcance
- Velocidad de disparo normal
- De movimiento veloz
- Muy débil cuerpo a cuerpo
- Moral muy escasa
Descripción
A pesar de la mala fama de su cuestionable temperamento, si se les trata correctamente, los camellos pueden ser dóciles y son menos nerviosos que los caballos. Además, gracias a su adaptación al desierto, cuentan con más energía y pueden aguantar largos periodos sin agua. Esto ofrecía gran flexibilidad estratégica a los comandantes pues, gracias a estos animales, los largos recorridos por terrenos desérticos dejaban de suponer un problema. Cuando se enfrentaban a la caballería convencional, el tamaño y el olor de los camellos hacían que los caballos rehuyeran la lucha. Con la invención de la silla norarábiga, en el siglo IV a. C., resultó mucho más fácil controlar al camello ya que, gracias a su firme y elevada posición, el arquero podía otear el campo de batalla y elegir a su objetivo cómodamente.